Jubilación para autónomos: cómo funciona

Xolo
Escrito por Xolo
el 01 de enero, 2022 7 min de lectura

Una de las preocupaciones de los autónomos en España, por si ya tuviera pocas, es la de cómo funciona la jubilación para autónomos. Es decir, ¿qué pensión va a recibir un autónomo una vez que deje de trabajar?
Entre todas las dudas que puedes tener, desde las bases de cotización para autónomos o qué cantidad de dinero recibe un autónomo jubilado, la primera que nos hacemos suele ser:

¿Cuántos años tiene que cotizar un autónomo para poder jubilarse?

En el siguiente artículo vamos a analizar cuándo y en qué circunstancias se jubilan los autónomos para que no pierdas detalle y tengas en cuenta todos los condicionantes.

  1. Las bases de cotización para autónomos
    1. Cuánto hay que cotizar como autónomo: base mínima o máxima
    2. Cuánto tiempo hay que cotizar como autónomo para poder jubilarse: ¿cuál es la media de años?
  2. ¿Es obligatorio pagar la cuota de autónomos aunque tenga un plan de pensiones privado?
  3. ¿Cuándo puede jubilarse un autónomo?
    1. Jubilación anticipada para autónomos
  4. Diferencias entre jubilación para autónomos y asalariados
  5. Por qué la jubilación para autónomos llega más tarde

1. Las bases de cotización para autónomos

Este es uno de los grandes dilemas de los autónomos, decidir cuál será tu base cotización. De ello dependerá las prestaciones que tendrás en el momento de tu jubilación como autónomo, entre otras.
Pero para ir paso por paso: ¿qué es la base de cotización de autónomos? Se trata de la cantidad mensual que un autónomo estipula para el pago de sus cotizaciones a la Seguridad Social. La base de cotización de un autónomo determina la prestación que recibe por cese de actividad, por incapacidad temporal o por la jubilación como autónomo.

A mayor cotización mayor renta (cuanto más paguemos, mayor será la prestación). Aunque los autónomos pueden decidir cuál será su base de cotización independientemente de sus ingresos reales, la realidad es que la inmensa mayoría deciden hacerlo por la base mínima, pudiéndose modificar las bases dos veces por ejercicio anual. El plazo abarca del 1 de enero al 30 de abril, con efectos palpables a partir del 1 de julio. Otra opción pasa por ejecutar modificaciones antes del 1 de noviembre, con efectos a partir del 1 de enero del año siguiente.

Se pueden realizar las solicitudes que se quieran, pero aquellas que se efectúen posteriormente al 1 de noviembre serán tomadas como parte del año natural siguiente. 

1.1 Cuánto hay que cotizar como autónomo: basé mínima o máxima

Es importante tener claro que la base de cotización como autónomo puede ser modificada en los distintos tramos de la vida laboral, así que esta flexibilidad puede jugar a tu favor (¡no todo va a ser malo!). Esta base transita entre los 960,60 euros de aportación mínima y los 4.139,40 euros de aportación máxima. Entonces, si tenemos claro que a mayor contribución mayor pensión resultante, y por lo tanto una mejor jubilación de autónomos, ¿por qué 9 de cada 10 autónomos se acoge a la base mínima?

Si nos vamos a los datos, el 86% de los que integran este colectivo se decanta por la base mínima. Esta información puede observarse en profundidad en el informe realizado por la ATA ‘El trabajador autónomo ante la previsión social’, destinado a la Fundación MAPFRE y que supone un diagnóstico diferencial que nos permite comprobar los modelos de conducta de los trabajadores por cuenta propia. Este comportamiento se deriva, principalmente, de la percepción de elevada fiscalidad, que acaba por limitar el poder adquisitivo en el día a día. Ante esta situación, los implicados deciden sacrificar lo que cotizan de cara al mañana. 

En resumen, no siempre es financieramente posible aumentar las bases, aunque sí es viable hacerlo cuando mejore la facturación (aunque sea por tramos temporales). Así, es posible mantener una proporcionalidad que abarque el grueso de la trayectoria profesional.

Otro dato que confirma el contexto en el que nos movemos es el siguiente: el 38,2% de los autónomos señala la falta de ingresos como la principal causa para no incrementar sus aportaciones.  Es decir, en época de vacas flacas es comprensible que no se quiera destinar tanto a la jubilación de autónomo, sin embargo, en un momento en el que la rentabilidad del negocio aumente también puede aumentar la cantidad de dinero destinado a estas prestaciones.

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1.2 Cuánto tiempo hay que cotizar como autónomo para poder jubilarse: ¿cuál es la media de años?

No solo importa el montante, también debe ponerse el foco en el total de años cotizados para poder acceder a una jubilación como autónomo. Hay que declarar un mínimo de 15 años, dos de ellos en la década y media previa a la edad legal de jubilación. En España la frontera se ubica a los 67 años, a partir de los cuales puede solicitarse este trámite. De media, los autónomos se jubilan a los 65 años y 6 meses.

En el cálculo definitivo contarán los últimos 264 meses, que son 22 años en total. A partir de 2027 se tomarán como referencia 25 años, por lo que es necesario apelar a la responsabilidad personal en función de las posibilidades reales, a fin de ir incrementando la base para alcanzar un resultado favorable a la hora de llegar a la jubilación para autónomos.

2. ¿Es obligatorio pagar la cuota de autónomos aunque tenga un plan de pensiones privado?

Sí, sentimos decirte que la obligatoriedad de pagar la cuota de autónomos no puede ponerse en duda bajo ningún concepto. Independientemente de haber contratado un plan de pensiones privado, todos los trabajadores autónomos están obligados a abonar lo que les corresponde por base de cotización. Los trabajadores asalariados están determinados por el llamado Régimen General, mientras que los trabajadores por cuenta propia se coordinan según el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). 

Este organismo define jurídicamente al autónomo como: “aquel que realiza de forma habitual, personal y directa una actividad económica a título lucrativo, sin sujeción por ella a contrato de trabajo y aunque utilice el servicio remunerado de otras personas, sea o no titular de empresa individual o familiar”.

De cara a la jubilación, el compromiso cae enteramente en manos del trabajador autónomo, que ha de velar por el cumplimiento de las aportaciones y calcular cómo repercutirán en la pensión futura. Esto quiere decir que como tu propio jefe, también está entre tus responsabilidades pensar a largo plazo y pensar en tu merecida jubilación como autónomo. Está pensión será mayor o menor en función de la trayectoria del profesional en términos cuantitativos. Esta es la razón por la que, a partir de los 48 años, se obliga a subir la base mínima de cotización, con el propósito de reforzar las últimas etapas profesionales.

3. ¿Cuándo puede jubilarse un autónomo?

Como ya hemos analizado, el proceso para conseguir una buena jubilación como autónomo es complejo y requiere de tener provechosos beneficios durante buena parte de la vida laboral. Esto, sumado a una actitud previsora, hará que tu futuro como pensionista disponga de todas las garantías. Desafortunadamente esto no ocurre en la mayoría de los casos. 

La edad media de jubilación de un autónomo es de 65 años y seis meses, aunque en 2027 se situará en 67 años. El trabajador autónomo también puede optar a un tipo de retiro anticipado y voluntario a partir de los 63 años, siempre y cuando declare tres décadas y media de actividad. No obstante, esta alternativa no es la más requerida por la inmensa mayoría, ya que el impacto en términos económicos es tremendo. Así, según la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), el número de aquellos que deciden no retirarse ha aumentado un 88,7% en 10 años.

¿Conclusión? Aunque los autónomos pueden jubilarse legalmente a los 63 años, la mayoría decide no hacerlo debido a las dificultades económicas que eso podría suponer.

3.1 Jubilación anticipada para autónomos

Hablando de prejubilación par podemos notar grandes diferencias entres trabajadores autónomos y asalariados. Aprovecharemos este bloque para explicar con detalle una situación que a muchos les beneficia y a otros les perjudica seriamente a la hora de jubilarse de manera anticipada como autónomos.

Hasta el 2013 los autónomos no podían retirarse antes de tiempo, es decir, con una edad por debajo de los 65 años. En 2007, el Estatuto del Trabajo Autónomo (Ley 20/2007) empezó a registrar algunas excepciones destinadas a la prejubilación, como operar en sectores considerados peligrosos para la salud y, como no, situaciones de discapacidad demostrable. Esta reformulación supuso un salto de gran valor para la equiparación de derechos laborales. ¿Mejoras para los autónomos? ¡Aleluya!

Tras la reforma en cuestión, los autónomos empezaron a jubilarse anticipadamente. Siempre 2 años antes de la edad establecida, que se está actualizando cada ejercicio anual. Todo queda establecido en el Decreto-Ley 5/2013 de medidas para favorecer la continuidad de la vida laboral de los trabajadores de mayor edad y promover el envejecimiento activo. En ese instante (hablamos del 15 de marzo de 2013) la línea roja se ubicaba en los 63 años. En 2027 alcanzará los 65, lo cual complica más esa simetría de la que venimos hablando a lo largo del presente post.  

Los autónomos han ido adquiriendo ventajas, pero a un coste de 35 años como exigencia mínima y con un 8% de pérdidas por cada año adelantado.  Es decir, más allá del papel, ¿es posible la prejubilación para los autónomos? Los datos dicen que a nivel práctico no lo es.

4. Diferencias entre jubilación para autónomos y trabajadores por cuenta ajena

La legislación que regula la jubilación anticipada nunca ha tenido en cuenta a los autónomos, y la actualización vigente no rectifica en absoluto las desigualdades evidentes. La jubilación para autónomos es la eterna cuenta pendiente con este colectivo, que sigue sin resolverse y que, en tiempos de COVID, complica todavía más la estabilidad de muchos de los contribuyentes.

Las asociaciones de autónomos han hecho hincapié durante años en la problemática derivada del retiro para autónomos y las condiciones económicas en que este tiene sacar adelante su negocio. Lo que se ha hecho (hasta la fecha) es posicionar en el mapa una problemática, dotándola de cierta solución legal pero sin llegar a cubrir las demandas reales. La jubilación para autónomos funciona en la teoría pero no en la práctica.

Los trabajadores autónomos no tienen derecho a la jubilación anticipada forzosa o por situación de crisis, contextos que sí quedan reflejados en el régimen general. 

En resumen, esta forma de jubilación anticipada para autónomos merecerá la pena dependiendo del estilo de vida del solicitante. Una familia con dependientes a su cargo es radicalmente distinta a una familia sin deudas y con patrimonio en su haber. En algunos casos, renunciar a buena parte de la remuneración repercute en un mayor disfrute del tiempo libre, en el que no se necesita de esa proporción de capital. ¿Cuándo compensa la jubilación para los autónomos? En general, solo si la pérdida de poder adquisitivo no afecta en exceso al afectado. 

5. Por qué la jubilación para autónomos llega más tarde

Como casi todos los autónomos cotizan por la base mínima, la consecuencia inmediata es el retraso de la jubilación que, según el caso, sobrepasa los 67 años. Muchos autónomos se debaten entre cobrar una pequeña jubilación o aguantar un poco más, escenario que remarca la injusta y asimétrica realidad de los trabajadores por cuenta ajena y cuenta propia. 

Como alternativa, algunos autónomos optan por recurrir a planes de pensiones de carácter privado, con intereses garantizados a largo plazo (PIAS) o un SIALP, una clase de seguro individual de ahorro que premia fiscalmente la inversión a lo largo del tiempo.

La cuestión es, ¿disfrutar de una buena jubilación para autónomos no debería ser un derecho en vez de una odisea?

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